EL MOTOTAXISMO COMO ALTERNATIVA DE EMPLEO EN LA CIUDAD DE SANTA MARTA
"El mototaxismo es un problema social que tiene su origen en el desempleo, pero ante todo en la forma como está estructurada la prestación del servicio de transporte público y en el modelo económico colombiano."
El mototaxismo representa un grave problema social porque de esta actividad informal de transporte público cientos de miles de personas derivan su sustento diario. Al mismo tiempo, el mototaxismo moviliza en todo el país a millones de pasajeros cada día, a un precio inferior al de su principal competidor, el transporte público colectivo y de taxi, causando así, el descontento del gremio transportador que paga impuestos y cubre millonarios gastos en repuestos.
En la ciudad de Santa Marta, como en todo el país, el problema se ha ido agudizando por las medidas antipopulares que ha tomado la Alcaldía Distrital para contrarrestar la prestación de este servicio ilegal en detrimento del transporte público organizado y la alta tasa de criminalidad imperante, crímenes que en su mayoría son realizados por sicarios motorizados. En Colombia la prestación del transporte público conduce a un transporte de baja calidad, con una flota inflada y una tarifa muy alta, inasequible para los más pobres que son quienes más necesitan el servicio.
En Santa Marta en particular, hemos sufrido la mala prestación del servicio público de transporte durante muchos años, donde el monopolio de algunos transportadores y la falta de iniciativa para crear nuevas rutas, han generado inconformidad en la comunidad.
Pero si hemos de encontrar razones de peso para entender el fenómeno del mototaxismo, debemos buscar en los altos niveles de desempleo una buena razón para entender el problema. Y es que mucha gente desesperada buscó en el mototaxismo la fuente de ingresos que la economía no le ofrecía, pero quizás lo más interesante es que el problema no es por falta de capital, por el contrario, ha habido personas con capital que han invertido en decenas de motos y contratado conductores o en prestarles a otros para que adquirieran una, lo cual nos pone a pensar que lo que falta es buenas empresas que utilicen ese capital y empleen a la gente.
Entonces, prohibir por decreto el mototaxismo es un recurso que lo frenará por un tiempo pero no lo eliminará, son paños de agua tibia que sólo generan actos vandálicos, por lo antipopular de la medida, y en nada soluciona los núcleos generadores del mismo: el mal servicio del transporte público y el desempleo. Se espera que la administración distrital en manos del alcalde, Juan Pablo Diazgranados, encuentre la fórmula salvadora que facilite una salida digna a tan complejo problema.
1 comentario
Fernando Sancivier -
Yo si estoy de acuerdo en eliminarlos y buscar otra alternativas de empleo mas acorde con las ciudades que queremos para nosotros y para mostrar al mundo.